Soy caraqueña, venezolana, nacida a finales de la época de abundancia de mi país. Siempre supe que quería cantar y sin darme cuenta los ritmos venezolanos se adueñaron de mi voz. Estando en el Orfeón Universitario y la Estudiantina Universitaria de la UCV, mientras estudiaba Comunicación Social, terminé de entender que esta sería mi vida. Conocer a los grandes de la música venezolana, cantar con ellos, viajar con ellos, conocer los recovecos de esta tierra de gracia y aprendérmela, me convencieron que no había otro camino para degustar mi vida.
Luego vino Pomarrosa, tres discos, mi hermana, amores y desamores, regalos de vida. El teatro me llenó para completar mis sueños. Un nuevo disco y les conté De dónde vengo junto a mis amigos músicos, honrando el canto de las mujeres de quienes aprendí a cantar. La primera despedida... Un nuevo amor, la vida, la Isla, mi hijo. Los sueños, las ganas, nuevos territorios. La segunda despedida... Y aquí estoy hoy, plena y agradecida, cantando “Canciones de aquí y de allá” para llevar todo lo que he aprendido y sigo aprendiendo más allá de estos rincones. Acompáñame
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Marina Bravo - Actriz
Con toda la admiración y el respeto que me inspira el oficio teatral, hoy puedo disfrutar de este proceso a partir de la formación que poco a poco he obtenido de maestros como Daniel Uribe, Marcos Purroy y América Alonso con el Centro de Directores para el Nuevo Teatro y últimamente en aventuras que empezaron por el coacheo vocal y me dieron la oportunidad de hacer teatro infantil con el Teatro Nueva Era, en compañía de mis queridos Willy Mckey, Jennifer Gásperi y José Alejandro España, de quienes tanto he aprendido. Un poco de TV y otro poquito de doblaje me reafirman como artista, es una aventura deliciosa meterme en otras pieles para que el público tenga oportunidad de disfrutar. A Todos mil gracias por las oportunidades y los viajes que me permiten crecer y explorarme no solo como actriz si no como ser humano.
Marina Bravo - Pediodista
En esa misma necesidad de expresión que siempre he sentido, estudiar para ser comunicadora fue la contención académica que conseguí para dar forma y canalizar estas ganas que tuve desde siempre de decir cosas interesantes, bonitas y que le dieran razones a los demás para sonreír. El periodismo me cautivó, aquellas prácticas de periodismo que me dieron herramientas para mi proceso artístico y la cercanía con la estética de la Fundación Bigott sin duda me definieron como profesional. Así nació Curruchá, mi revista, un espacio que se complementó con la investigación para la música que cantaba y que dio sentido a mi vida.
Marina Bravo - Cantante
Nací en una casa de abogados, soy la más chiquita de 4 hermanos, abogados internacionalistas… ya a los 6 años estaba haciendo mi primer solo en el coro de la iglesia. Así transcurrió mi infancia, entre muñecas y conciertos locales, yo sabía que quería ser cantante. Luego en la adolescencia los festivales de las voces liceístas me fueron abriendo espacios, los primeros no los gané pero poco a poco fui entendiendo la mecánica del asunto. Ya en la UCV en la escuela de sociología, me conocían más como cantante que como estudiante. Cuando llegó el cambio de escuela a Comunicación social, ya cantaba en el Orfeón Universitario y era la cantante de la Estudiantina y gané el festival de la Voz Ucevista y representándola me convertí en Voz Universitaria Nacional. Ese mismo año cantando con el OU alterné en escenario con Serenata Guayanesa, Simón Díaz, María Teresa Chacín, Francisco Pacheco entro otros y supe que había encontrado mi camino, la música venezolana, lo demás… Ya es historia sabida.